¿Cuánto Vale una Reforma Integral de un Salón Comedor?

Realizar una reforma integral en el salón comedor de tu vivienda puede transformar completamente este espacio, haciéndolo más funcional, moderno y acogedor. El salón comedor es el corazón de cualquier vivienda, un espacio donde se reúne la familia y los amigos para compartir momentos especiales. Por ello, no es de extrañar que muchas personas se planteen reformarlo en algún momento. Pero, ¿cuánto cuesta una reforma integral de un salón comedor?

En este artículo, exploraremos cuánto puede valer una reforma integral de un salón comedor en Madrid, brindando trucos y consejos para gestionar el presupuesto de manera eficiente y cómo solicitar presupuesto para obtener el mejor valor por tu inversión.

Factores que Influyen en el Costo de una Reforma Integral

El precio medio de una reforma integral de un salón comedor en Madrid oscila entre los 1.345€ y los 5.065€. Este precio incluye la mano de obra y los materiales, pero no los honorarios del arquitecto ni los permisos municipales.

1. Tamaño del Salón Comedor

El tamaño del espacio es uno de los factores más determinantes en el costo de una reforma integral. Un salón comedor más grande requerirá más materiales y mano de obra, lo que incrementará el costo total.

2. Alcance de la Reforma

El alcance de la reforma también influye significativamente en el costo. Una reforma integral puede incluir:

  • Demolición y redistribución de espacios
  • Renovación de instalaciones eléctricas y de fontanería
  • Mejora del aislamiento térmico y acústico
  • Sustitución de suelos y revestimientos
  • Instalación de nuevas ventanas y puertas
  • Actualización de sistemas de climatización
  • Incorporación de tecnología y domótica

3. Calidad de los Materiales

La elección de materiales puede variar enormemente en precio. Por ejemplo, los suelos de madera maciza serán más costosos que los laminados, y las ventanas de alta eficiencia energética costarán más que las estándar.

Más info.

Ideas para aprovechar al máximo el espacio reformas de pisos pequeños

Vivir en un piso pequeño puede presentar desafíos en términos de espacio y organización. Sin embargo, con un poco de creatividad y planificación inteligente, es posible maximizar cada centímetro cuadrado y crear un espacio funcional y acogedor. En este artículo, exploraremos una serie de ideas y consejos para aprovechar al máximo el espacio en pisos pequeños, ofreciendo soluciones prácticas y creativas para optimizar la distribución y mejorar la funcionalidad del hogar.

1. Utilizar muebles multifuncionales:

Una de las mejores maneras de maximizar el espacio en un piso pequeño es optar por muebles multifuncionales que cumplan más de una función. Por ejemplo, un sofá cama puede servir como un lugar para sentarse durante el día y convertirse en una cama adicional para invitados por la noche. Del mismo modo, una mesa extensible puede adaptarse según las necesidades de espacio, proporcionando espacio para comer o trabajar cuando sea necesario.

2. Aprovechar las paredes:

Cuando el espacio en el suelo es limitado, es importante aprovechar al máximo las paredes. Instalar estanterías flotantes, estantes sobre puertas o incluso crear una pared de almacenamiento vertical puede ayudar a liberar espacio en el suelo y mantener el espacio organizado. Además, colgar espejos en las paredes puede crear la ilusión de un espacio más grande y agregar luz a la habitación.

3. Optimizar el almacenamiento:

El almacenamiento inteligente es clave en un piso pequeño. Busca soluciones de almacenamiento que aprovechen cada rincón disponible, como cajones debajo de la cama, organizadores colgantes en el armario o muebles con espacio de almacenamiento integrado. Además, considera utilizar contenedores transparentes o etiquetados para mantener el orden y facilitar la búsqueda de objetos.

4. Crear zonas multifuncionales:

En un piso pequeño, es importante maximizar cada espacio disponible. Considera crear zonas multifuncionales que puedan adaptarse según las necesidades del momento. Por ejemplo, un rincón de lectura puede convertirse en un espacio de trabajo durante el día, mientras que una mesa plegable puede servir como comedor o área de trabajo según sea necesario.

Más info.

Cómo solicitar un presupuesto de obras: Una guía detallada

Cuando se decide emprender un proyecto de obras en un inmueble, ya sea una reforma integral o parcial, es crucial obtener un presupuesto detallado que refleje los costos asociados con la realización de la obra. En este artículo, proporcionaremos una guía detallada sobre cómo solicitar un presupuesto de obras, incluyendo los datos que se deben facilitar para obtener una estimación precisa.

1. Superficie del inmueble:

Al solicitar un presupuesto de obras, es importante proporcionar información precisa sobre la superficie total del inmueble en el que se llevarán a cabo las obras. La superficie del inmueble puede influir en los costos de la obra, ya que proyectos más grandes pueden requerir más mano de obra, materiales y tiempo para completarse.

2. Tipo de reforma a realizar:

Es fundamental especificar claramente el tipo de reforma que se llevará a cabo al solicitar el presupuesto de obras. Esto puede incluir detalles sobre si se trata de una reforma integral o parcial, los espacios específicos que se van a reformar (cocina, baños, dormitorios, etc.), y cualquier requisito especial que pueda aplicarse según el tipo de reforma.

3. Localización del inmueble:

La ubicación del inmueble también es un factor importante a considerar al solicitar un presupuesto de obras. Los costos de la mano de obra y los materiales pueden variar según la zona en la que se encuentre el inmueble, así como los requisitos específicos de construcción y regulaciones locales que puedan aplicarse.

4. Si el edificio tiene ascensor:

En caso de que el edificio cuente con ascensor, es importante mencionarlo al solicitar el presupuesto de obras. La presencia de un ascensor puede afectar los costos de la obra, especialmente si se requiere desmontar o modificar parte de la estructura existente para realizar las obras planificadas.

Más info.

Dividir una vivienda en dos

Dividir una vivienda grande para hacer dos apartamentos más pequeños puede ser una buenísima solución si queremos alquilarlos y queremos obtener más rentas, puedes sacar partido a un piso antiguo que tiene estancias completamente inutilizadas para redistribuirlo y ganar espacios funcionales, más asequibles y fáciles de mantener. También puede ocurrir que se quiera dividir la vivienda en el caso que quisiéramos darle más intimidad a los hijos por ejemplo o incluso en caso de divorcio o de herencia.

  1. Autorización administrativa

Por supuesto tienes que tener en cuenta las medidas de la casa porque debes cumplir unos espacios mínimos para cada vivienda (cada comunidad autónoma tiene las suyas así que te recomendamos que hables con un técnico que pueda guiarte). Esta normativa (La Ley de Suelo, las normas de urbanismo de cada comunidad autónoma y del propio Ayuntamiento y la Ley de Propiedad Horizontal) establece criterios de habitabilidad mínimos, en cuanto a metros útiles, distribución y equipamiento que se deben cumplir para que obtenga la licencia y sea legal alquilarla, habitarla o venderla.

  1. Permiso en la comunidad de vecinos

Cuando la vivienda pertenece a un complejo u edificio de viviendas, es necesario además tener la autorización de la comunidad de propietarios para poder realizar la división. La Ley de Propiedad Horizontal exige que estén de acuerdo al menos 3/5 partes de los propietarios, esto puede tener una excepción y es si en los estatutos de la comunidad se estipula que  se puede dividir la vivienda, en ese caso no necesitarás la autorización siempre que se ajuste a lo establecido en los estatutos.

  1. Redistribución de cuotas

La división de la vivienda va a provocar que cambie la estructura de los apartamentos resultantes por lo que va a conllevar una redistribución de las cuotas a pagar en la comunidad. Generalmente se va a calcular en función de la superficie de la vivienda. Este nuevo porcentaje de contempla cuando se envía la solicitud de división de la vivienda a la comunidad de vecinos y ellos son los que votan la división y las nuevas cuotas.

  1. Proyecto de obra

Cuando se hace la reforma integral en el piso, en la mayoría de los casos se va a necesitar una licencia de obra mayor. Para eso, es obligatorio que un arquitecto elabore el proyecto ajustándose al Código Técnico de la Edificación, en cuanto a la densidad de las viviendas, los requisitos mínimos de habitabilidad, aislamiento térmico y acústico, entrada independiente, etc.

El técnico debe solicitar dicha licencia en el Ayuntamiento presentando un proyecto realizado y firmado por un arquitecto o arquitecto técnico, y abonar las tasas estipuladas.

El precio del proyecto puede rondar entre los 700 euros por m2 para una reforma integral y entre 400 euros por m2 en reformas básicas.

  1. Escritura ante notario e inscripción en el Registro

Una vez terminados y validados todos los trámites explicados con anterioridad procederemos al siguiente. Para legalizar la división de la vivienda, debe hacerse obligatoriamente una escritura pública para acceder al Registro de la Propiedad, esta manera cada una de las partes resultantes de la división contará como una hoja registral propia. Esto implicará un nuevo impuesto, el de Actos Jurídicos Documentados.

Por último tendrás que pedir la licencia de primera ocupación para que cada vivienda tenga su propio suministro de luz, agua y gas.

  1. Diferentes formas de hacer la división de la vivienda

Todo dependerá de la forma que tenga la vivienda en cuestión. Si se trata de una vivienda individual aislada, puede hacerse de manera horizontal, dejando cada piso como una vivienda independiente o vertical, dividiendo la finca de arriba abajo. También puede ser el caso de que no se divida justo por la mitad la vivienda sino que sea una parte, de tal manera que sería una segregación.

Requisitos para la división en la Comunidad de Madrid

  • Las viviendas deben ser exteriores, es decir que tengan al menos un hueco en una fachada que de a la vía pública o espacio libre público o a un patio que tenga al menos 200 m2.
  • Debe tener una facha mínima de al menos 3 metros, este punto también puede ser muy importante si quisieras cambiar de uso de local a vivienda.
  • Superficies mínimas dependerá si se trata de una vivienda convencional con las estancias separadas o bien si es un estudio.
  1. Vivienda convencional: Separación entre salón, cocina, dormitorio y baño. Superficie mínima 38 m2.
  2. Estudio: sin separación de estancias salvo el baño: salón/cocina/dormitorio y baño. Superficie mínima 25 m2.
  • Altura libre dependerá del tipo de estancia en la que nos encontremos.
  1. Será como mínimo de 2,50 m en las piezas habitables, es decir, dormitorio, salón y cocina. Esto sebe de suponer al menos el 75% de la superficie útil total de la vivienda.
  2. Será como mínimo de 2,20 m en las piezas no habitables, es decir, baños y pasillos. Debe de suponer como máximo el 25% de la superficie útil.
  • Requisitos mínimos de las piezas (habitables y no habitables).
  1. Cocina: Debe contar de la evacuación de humos y gases, independientemente de los huecos de ventilación. Esta evacuación tiene que ser un conducto independiente obligatoriamente a cubierta. Sino fuera posible que salga a cubierta, podría salir a fachada siempre y cuando sea una campana con filtro de carbón. Superficie mínima: 6 m2
  1. Pasillo: Su ancho debe de ser como mínimo de 85 cm, a no ser que sea un estrechamiento puntual de no más de 30 cm de largo, en cuyo caso podría reducirse a 60 cm.
  2. Dormitorio doble: Debe tener ventilación e iluminación natural (ventanas) y su superficie mínima: 12 m2
  3. Dormitorio individual: Debe tener ventilación e iluminación natural (ventanas) y su superficie mínima: 7 m2
  4. Salón: Debe tener ventilación e iluminación natural (ventanas) y su superficie mínima: 14 m2
  5. Salón-cocina: Debe tener ventilación e iluminación natural (ventanas) y su superficie mínima: 21 m2
  6. Aseo: Superficie mínima: 3 m2
  • Condiciones de ventilación e iluminación.
  1. Todas las piezas habitables (dormitorios, salón, cocina) tienen que tener ventilación natural (ventanas) (al menos el 8% de la superficie útil de la pieza).
  2. Todas las piezas habitables (dormitorios, salón, cocina) tienen que tener iluminación natural (ventanas) (al menos el 12% de la superficie útil de la pieza).
  3. Las piezas no habitables (baño, pasillo, vestíbulo) pueden tener ventilación natural directa (ventanas) o conducida (por shunt) o forzada (ventiladores) -Para que una ventana se pueda computar a efectos de ventilación e iluminación, ésta ha de estar en una pared y dar a la vía pública (calle) o a un patio de dimensiones mínimas 3×3 m (pudiendo ser mayor el patio en función a la altura del edificio).

Reforma integral estilo industrial

Se trata de un estilo que se asemeja a la industria de la década de los 50, puede tener un aspecto frío y mas bien rudo, pero si se combina con una decoración y mobiliario más confortable, puede dar unos excelentes resultados.

En este tipo de reformas, los grandes ventanales que llenen la habitación de luz, tienen un papel muy protagonista. También hay que prestar especial atención a las zonas de paso, prevaleciendo los espacios diáfanos. Se trata de aprovechar al máximo pilares, columnas, vigas, paredes de ladrillo, arcos, bóvedas y todo aquella parte constructiva de nuestra casa que veíamos como defectos y convertirlos en virtudes.

  1. Pilares y columnas

Además de su evidente función estructural, pueden tener un papel importante en la decoración de tu vivienda. Nos pueden ayudar a hacer la transición de los espacios. Dale personalidad a tu casa y hazla única con estos pequeños detalles.

Reforma inetgral Estilo industrial

También puedes utilizar el pilar como el eje decorativo de la casa, en vez de aislarla, inclúyela dentro de la composición como si fuera un elemento más. Cerca de una lámpara de pie y al lado de la alfombra, hará que el espacio quede completamente enmarcado.

Otra idea para darle un toque industrial a la vivienda puede ser, a partir de una columna de hierro que tengamos en la vivienda, colocar la encimera de aluminio por ejemplo, la columna ejercerá de falso pie para la cocina y le dará un aire muy renovado.

Incluso si tu casa es un dúplex, puedes aprovechar y utilizar la escalera como eje de una escalera de caracol para conectar las dos plantas de tu vivienda. Haz que tu vivienda sea estética y funcional a la vez.

  1. Recupera las vigas

En una reforma integral puedes recuperar las vigas de la estructura y dejar las vistas. Esto le dará un toque muy industrial a la vivienda y mejorará mucho su estética. El estilo industrial apuesta mucho por la belleza de la estructura desnuda, tratando de conservar la estructura original. Las vigas no tienen por qué ser de madera, estás también te darán excelentes resultados sin son de hormigón o de acero. Es un pensamiento popular pensar que este tipo de vigas da una sensación fría, puedes pintarlas del mismo color que el techo para contrarrestar ese efecto y además no renunciar a la estética de las vigas vistas.

Si tus vigas son de madera aprovéchalas, darán un toque de confort a la casa, te aseguramos que quedan bien en cualquier habitación, aunque de esta manera quizá le des a tu casa un toque más rústico.

  1. Paredes de ladrillo

Si en tu cabeza te imaginas tu casa como ese loft neoyorkino de los 80, una pared de ladrillo visto puede ayudarte y mucho. Es un hecho que son tendencia en el diseño de interiores y se puede adaptar a cualquier espacio de la vivienda.

Se trata de un material resistente, duradero y muy fácil de mantener. Esto te puede ayudar a dar un cambio a tu vivienda sin la necesidad de una gran inversión.

Más info.

Reforma integral o reforma parcial en vivienda

Es normal que en el momento de dar el paso de actualizar tu vivienda, no sepas si hacer de una reforma total o parcial, interviniendo solo en algunas de las estancias.

  1. Reforma integral de una vivienda.

Como todo proceso encontramos aspectos positivos y negativos aunque siempre recomendamos una visión a largo plazo.

Ventajas

  • Crea un espacio adaptado y personal para ti y tu familia. Crear una nueva distribución, más diáfana o compartimentada dependiendo de nuestras necesidades.
  • No se corre el riesgo de tener que realizar obras por duplicado. Si hacemos una reforma integral evitaremos a la larga que se tengan que rehacer reformas. A la hora de pintar por ejemplo, poner el suelo y más tarde tener que cambiar una instalación. De esta manera nos olvidaremos de reformas por mucho tiempo.
  • Revalorizar el piso de una forma muy considerable. Si la reforma integral está bien hecha por parte de una buena empresa, el valor de mercado del piso aumentará considerablemente por su eficiencia, los espacios, siempre tiene más valor un inmueble reformado.
  • Revisar las instalaciones de luz y agua. Cuando las instalaciones son antiguas, es cuestión de tiempo que empiecen a dar problemas. Si nos embaucamos en una reforma integral, es buen momento para prestar atención a las instalaciones de la vivienda.
  • Apostar en aislamiento térmico. Invertir en confort en el hogar siempre es una buena inversión, y notarás la diferencia en el ahorro de climatización tanto en invierno como en verano.

Inconvenientes

Son pocos los puntos en contra de una reforma integral.

  • Las reformas pueden durar un tiempo considerable así que se recomienda tener una vivienda donde poder estar durante la espera.
  • El presupuesto es mayor que en una reforma parcial, pero no hay duda de que si sumas los presupuesto parciales que has ido haciendo, acabarías ahorrando si te decidieras por una reforma integral.
  • Se puede dar el caso, dependiendo de la zona, que tengas que avisar a tus vecinos para la reforma. En la mayoría de los casos no supone impedimento alguno para el proceso.
  1. Reforma parcial de una vivienda

Decidirse por ir reformando cada parte poco a poco también es una opción.

Ventajas

  • No será necesario buscar un sitio donde alojarte mientras se lleva a cabo la reforma puesto que algunas de las estancias están libres. Aunque quizá más tarde tendrás que realojarte en otra de las habitaciones si luego tengan que pasar por esa habitación para hacer alguna intervención.
  • Pequeñas reformas también pueden darle a tu vivienda una nueva imagen si sabes bien donde actuar. Si lo que quieres es ser eficaz y acertar, contacta con profesionales que te hagan ahorrar dinero y no duplicar la reforma en unos años.
  • El presupuesto será mucho menor y lo notarás. Esto es obvio, estás efectuando menos obras y será necesaria menos mano de obra.
  • La remodelación de un baño o de una cocina también ayudará a revalorizar tu casa de cara a una posible venta.

Inconvenientes

  • Si es una vivienda antigua que necesita una reforma integral pero aún así decidimos hacer una parcial, es posible que se ralentice porque surgirán impedimentos de materiales, de deterioro de elementos. Este tipo de imprevistos pueden llevarte a una reforma más cara de lo que pensabas sin haberla proyectado.
  • Si la reforma parcial fuera en la cocina o en el baño (y solo contamos con uno en toda la casa) si que es recomendable buscar otra vivienda donde esperar, ya que podría entorpecer los tiempos estipulados de la reforma y prolongarla.
  • Puede llegar a desestabilizar el hecho de que partes de la casa si se hayan reformado y en cambio otras sigan teniendo aspectos a mejorar. No tendrás la sensación de estar en un ambiente nuevo y homogéneo pese al desgaste de la reforma y al desembolso económico.
  • El momento de terminar la obra, empezarás a plantearte la siguiente obra que necesita la casa y no llegarás a disfrutar la obra ya realizada. Esto puede llevar a un desgaste mental.

Suelos para una reforma integral

Todos los detalles cuentan y tienen su importancia a la hora de hacer una reforma integral. La elección de los materiales que usarás también es una de las decisiones más importantes y es normal que tengas dudas debido a la gran variedad que hay.

El que un espacio parezca más o menos confortable, que cuente con tu personalidad, más frío o más cálido, más rústico o más elegante, todas estas decisiones se tienen que tomar con una consideración previa porque te acompañaran cada día durante mucho tiempo en casa.

En este artículo te daremos algunas pautas a seguir en la elección de un buen material para cada uso y estancia.

Antes de empezar tenemos que hablar del presupuesto. Cada persona se marca uno máximo a la hora de hacer la reforma integral, y eso también pone el límite en el momento de elegir un material u otro. Esta cantidad de dinero se iré dividiendo en las correspondientes partidas de la reforma y una de estas serán los materiales (de mayor o menor calidad según el presupuesto). La ayuda de unos buenos profesionales puede ser crítica para que esto no sea del todo así, y poder conseguir muy buenos materiales y resultados con un presupuesto más humilde. Lo importante es administrar bien el dinero y no despilfarrarlo, actuar con cabeza y asesorado.

Los materiales y acabados te darán la posibilidad de crear diferentes ambientes que luego tu mismo reforzarás con mobiliario y decoración.

Cuanto más decididos tengas los materiales que vas a utilizar, más preciso será tu presupuesto.

Ten en cuenta que intervienen mucho factores en el hecho de elegir un material u otro ya que no es igual el tipo de casa (de la playa, en el campo, piso en el centro de la ciudad), el estilo decorativo que más se adapta a ti (minimalista, recargado, arriesgado, alternativo, ecológico), o por ejemplo las condiciones climatológicas del lugar. Dependiendo de estos aspectos entre otros, tendrás que elegir materiales.

Aquí te dejamos algunos consejos a tener en cuenta a la hora de la elección:

  1. Busca equilibrio y unidad entre los materiales que elijas.

No significa que no se puedan crear contrastes para cambiar de estancia, sino que es importante que exista una armonía global en la vivienda. Por ejemplo, puedes combinar un suelo de parquet en la vivienda y en los cuartos húmedos como cocina o baños, utilizar baldosas hidráulicas. Estos contrastes casan a la perfección y le da un aspecto muy moderno.

  1. Haz distinción entre los materiales interiores y los exteriores.

Utiliza cada uno de los materiales donde corresponda. No es recomendable mezclarlos ya que no están destinados para eso y pueden surgir luego problemas. La durabilidad y resistencia de un material va ligada a las características del ambiente. Colocar baldosas en la terraza no será la mejor idea, aunque sean resistentes, lo son para el interior de la vivienda donde no hay cambios tan drásticos de temperatura. Mejor colocar algún tipo de piedra que nos garantice calidad.

  1. Apoyarte en el material para las sensaciones.

Si tu casa no cuenta con muchos metros cuadrados, puedes sacar partido del material y apoyarte en él para que parezca más grande. Por ejemplo, en un baño de dimensiones reducidas puedes optar por baldosas de dimensión media – grande para evitar que haya muchas juntas y en tonos claros. Si te gustaría que tu salón diera sensación de calidez puedes optar por parquet o tarima para lograrlo.

  1. Porcelánicos.

Es importante pensar en el mantenimiento que necesita cada material y el tránsito que tiene nuestra casa. Hay veces que por mucho que nos guste un tipo de suelo, no es compatible con el ritmo de vida de la vivienda. Un suelo de madera con una mascota tampoco es de las mejores ideas, puedes plantearte suelos laminados o vinílico que imite la madera. Tendrás unos resultados similares pero resulta más sencillo de colocar (abaratando la mano de obra) y es más resistente.

Del mismo modo pasa en las paredes. Por ejemplo en la cocina, un azulejo que tenga muchas hendiduras donde pueda acumularse suciedad no será una buena idea. Hay que pensar más allá del diseño.

Una vez comentados estos consejos, hablaremos de los materiales y cual puede adaptarse más a ti y a tus necesidades.

TIPOS DE SUELOS

El suelo es un cambio fundamental para dar un cambio de imagen en la vivienda. Colocar un material de calidad será decisivo y nos dará seguridad, comodidad, confort y aislamiento.

  1. Tarima flotante o suelos laminados.

Es uno de los materiales más utilizados en las reformas integrales. No solo por su fácil instalación, sino por los resultados. Dotarás a la vivienda de la calidez que estabas buscando a un precio reducido. No necesitan mucho mantenimiento de acuchillarlos o de barnizarlos, aunque si es cierto que no soportan bien la humedad. Si tu casa está en una zona húmeda y te has decantado por este tipo de suelo, también existen con propiedades de antihumedad pero ya no será tan económico.

  1. Parquet.

También es muy utilizado en las reformas para aportar confort, elegancia y buen aislante térmico a la vivienda. Tiene un contra y es el mantenimiento periódico que necesitan, además no resisten muy bien los cambios de temperatura.

  1. Cerámicos.

Dependiendo del tipo de barro que se haya usado, dará una calidad u otra. El gres es el suelo cerámico más popular con una durabilidad muy alta ya que está formado por una clase de barro muy resistente. Si es una baldosa gres rectificado además de ser muy resistente, será fácil de limpiar y de mantener, claro está que la cerámica no dará la sensación de calidez que te puede aportar la madera. También cabe señalar que no son muy resistentes ante los golpes secos y no es de extrañar que se rayen.

  1. Porcelánicos.

Son suelos cerámicos pero hechos con una sola cocción, de tal manera que son más resistentes frente a roturas y además permiten la imitación de otros materiales como por ejemplo de la madera, el mármol o la piedra natural. Tiene una solida composición y apariencia, por lo que se puede incluir en espacios de gran afluencia y tránsito o incluso en fachadas. Estos suelos absorben muy poco agua y no tienen problema en los cambios bruscos de temperatura. Al ser tan resistentes, puedes encontrar baldosas de mayor tamaño que de cualquier otro material.

  1. Vinílico.

Es un suelo autoadhesivo que se instala bajo planchas o en láminas, por lo tanto su instalación no requiere de gran dificultad. Son bastante económicos, fáciles de limpiar y la variedad en sus diseños es infinita. Puedes colocarlo en cualquier parte de la casa pero hay que tener en cuenta que su calidad y resistencia no es muy elevada ya que su principal componente es el plástico.

  1. Piedra natural.

Es una muy buena opción como material para tu reforma integral. Puede que su precio es lo menos atractivo, pero si puedes permitírtelo, es un acierto seguro. El tipo de piedra que utilicemos hará variar su coste sustancialmente. Son suelos resistentes, garantizan durabilidad, versatilidad e impermeabilidad. Además puede convertirse en un elemento clave de la decoración de tu casa, por lo tanto busca una piedra que se adapte al estilo de tu casa.

Para un suelo interior podemos recomendarte 3 tipos de piedra:

  • Mármol: Una de las piedras naturales más duras y resistentes del mercado. Es una piedra conocida por su belleza y elegancia.
  • Pizarra: Este tipo de piedra tiene la capacidad de adaptarse a todo tipo de estilos. Este tipo de suelos suelen ser resistentes y consistentes. Tiene un tono característico negro, por lo que lo convierte en un aliado muy elegante y exclusivo.
  • Caliza: Puede destacar por su ligereza y simplicidad. Aunque existen una gran variedad de tonos de esta piedra. Ser un material tan poroso también hace posible que se pueda instalar en exteriores.

Dentro de los suelos de piedra natural exteriores recomendamos 2 tipos:

  • Travertino: Se trata de una variación del mármol. Es un material tan bello que convierte cualquier espacio donde se coloque en un espacio exclusivo y único. También tiene unas características internas que lo convierten en un material sencillo para trabajar.
  • Cuarcita: Se trata de un material muy utilizado por sus características. Alta resistencia a los cambios de temperatura, durabilidad y absorción de agua. De manera natural se encuentra en tonos marrones pero es posible que esté disponible en tonos blancos o negros.
  1. Microcemento.

Su aspecto imita al hormigón pulido, por lo tanto si quieres que tu vivienda tenga un aspecto industrial moderno, es una opción que está muy de moda. Este tipo de suelos no genera escombros en la construcción, se adaptan a cualquier superficie (por lo que no hará falta quitar el suelo anterior para instalarlos, excepto si es parquet) y no son porosos, así que tendremos una superficie sin muchas juntas e impermeable. Son suelos que no se deben limpiar con lejía o productos que la contengan.

¿Una reforma integral o una reforma parcial de vivienda?

¿Lanzarse a una reforma integral o emprender una reforma parcial?

Si no has pensado suficiente en ello, puede que al hacerte la pregunta te hayas respondido sin duda que una reforma total. La reforma integral es el anhelo de cualquiera que quiera conseguir la casa de sus sueños y no haya pensado de verdad en ella.

Desde luego, una reforma integral es una forma rápida de conseguir esa casa de tus sueños. Pero empezar por una reforma parcial no quiere decir que renunciemos a ella.

Si reformamos la casa poco a poco, también podemos llegar a conseguirla. Y a veces, tomarnos tiempo para ello puede ser ventajoso. El económico no es el único factor que determina una reforma. Sin embargo, no podemos engañarnos. Debemos admitir que es uno de los más condicionantes. Por ello, hemos decidido dedicar un apartado único a hablar del precio de una reforma de tipo parcial y del de la reforma integral de una vivienda.

En general, la reforma parcial cuesta más que la reforma integral. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el presupuesto necesario puede ser menor en el primer caso.



A la larga, si pretendemos reformar por completo una vivienda, la reforma
integral o acometer el proyecto de una sola vez, nos costará menos.
Los presupuestos de profesionales para una reforma integral pueden contar con
descuentos, con ofertas o pueden presupuestarnos bajo un margen comercial
menor, frente a los ofrecidos para una reforma parcial. La compra de materiales
también puede tener descuento por cantidades más altas. Y todo ello puede abaratar el precio total de la reforma.
No obstante, la inversión será muy alta.Por eso, aunque a la larga cuesta algo más, es posible que debamos elegir
una reforma parcial tras otra, hasta la reforma total. Si no disponemos de un
presupuesto alto que cubra la integral y no queremos endeudarnos, podemos
valorar como ventaja la reforma parcial que necesitará un presupuesto
inmediato mucho menor. Y es posible que hasta nos demos cuenta de que no
necesitábamos una integral para conseguir la casa de nuestros sueños.

Más info.

Errores en reforma integral cocina

Si estás cansado de tu cocina y ya no aguantas más para tener la cocina que siempre te has imaginado, es tu momento. Comienza a imaginar y a proyectar como querrías que fuera. Nadie mejor que tú sabe las necesidades que tenéis en casa y como debe de ser. Pide ayuda a profesionales porque tu experiencia podrá darte ideas que no se te habrían ocurrido. Ahora es el momento de crear e imaginarte tu cocina ideal.

En esta última época las cocinas se sitúan a la cabeza entre las remodelaciones que se hacen en una casa. Tenemos normalmente claro que es lo que queremos cambiar y como queremos que quede pero, no es de extrañar que a lo largo del proceso de la reforma surjan imprevistos que no teníamos reflejados en el proyecto y haga que esta se retrase y alargue más de la cuenta. Por lo tanto, te recomendamos que antes de empezar la reforma eches un vistazo a estos errores que son bastante comunes entre nuestros clientes pero muy fácil de evitar.

  1. No ponerte en las manos de un buen profesional.

Entenderán perfectamente nuestras necesidades y lo único que quieren es ayudarnos y que salgamos satisfechos del proceso. Ellos nos harán preguntas acerca de nuestros hábitos para saber cuánto espacio necesitará cada estancia o directamente para entender nuestras necesidades en la cocina; cómo distribuirla,  cuánto almacenaje vamos a necesitar, en resumen, una cocina que se adapte perfectamente a nosotros. Es importante que la persona en la que depositas tu confianza conozca que tipo de cocineros somos, de esta manera podrá hacer un diseño más o menos ergonómico de la cocina, unas alturas u otras en el mobiliario, para evitar futuros dolores de espalda, por ejemplo.

Partiendo del presupuesto que nos hemos marcado desde el principio, el técnico nos asesorará para hacerlo de la mejor manera y no cometer ningún error. Es importarte preguntarle a cerca de los tiempos que estima para la reforma para que nosotros nos hagamos una idea y luego no nos llevemos sorpresas.

No te preocupes, te ayudarán a que tu cocina sea única para ti, funcional y práctica.

  1. Olvidarnos de las instalaciones a la hora de reformar.

Es muy importante que tengamos en cuenta todos los residuos que podemos generar en la cocina y por lo tanto como vamos a gestionarlos para que desaparezcan. Un buen aparato de extracción que solucione los olores en la cocina que se puedan extender por toda la casa, necesitará de un análisis para conocer la aspiración que va a necesitar y la salida al exterior posible en cada caso. Te recomendamos que para mejorar su eficiencia sea lo más corto y recto posible, siempre teniendo en cuenta la normativa.

Puedes colocar el fregadero frente a la ventana y un grifo llamativo y plegable, puede ser que sea algo más costoso que una cocina tradicional pero si pasas mucho tiempo en la cocina, te valdrá la pena la inversión.

Es mejor dejar un espacio prudencial de encimera entre el fuego y el fregadero, lo ideal es colocar la vitrocerámica en una isla para cocinar más cómodamente, pero si no es tu caso, con una distancia conveniente será más que suficiente. También es conveniente situarla lo más alejada de corriente de aire (sobretodo si tenemos cocina de gas), del espacio de comedor o de las estancias con las que linde (en caso de que sea una cocina abierta).

Tampoco puedes olvidarte de la instalación eléctrica. Una cocina debe estar muy bien iluminada y por supuesto suficientes enchufes. Piensa por un momento la cantidad de electrodomésticos que activas mientras cocinas. Cuando estés diseñando la cocina, piensa también dónde quieres colocar los puntos de luz y los enchufes para que cuando los albañiles empiecen la reforma los coloquen ellos donde les parezca más acertado. Asegúrate de que todas las instalaciones quedan sobre el falso techo y entre los revestimientos de las paredes. Una vez terminada la reforma con los materiales que revisten ya colocados, serán mucho más difícil y costoso de mover. No cuesta nada dedicar un tiempo a pensarlos y te ahorrara quebraderos de cabeza pasado el tiempo.

  1. No pensar en la funcionalidad.

Cuando diseñamos una cocina solemos pasar mucho más tiempo pensando en el diseño y la estética que en lo realmente funcional. Por ejemplo, los electrodomésticos. Es importante conocer las fichas técnicas de los electrodomésticos y saber si van a necesitar una ventilación, toma de agua o de luz, huecos para colocarlos mayores de lo que habíamos proyectado y ahora no nos entran, alturas o anchos mínimos, diámetros para las salidas, etc. Siempre hay que tener en cuenta estas necesidades ya que suponen detalles esenciales que pueden provocarnos que no entren los electrodomésticos que ya tenemos comprados o encargados.

Otro fallo en la funcionalidad es no tener en cuenta el almacenaje. Ten esta frase clara: en una cocina nunca se tiene suficiente almacenaje. Es primordial diseñar la cocina aprovechando al máximo cada rincón. Si por ejemplo tienes una altura libre considerable, puedes colocar armarios en esta zona y usarlos para almacenar lo que utilices menos, por el contrario, reserva los armarios de altura media para los utensilios de diario que necesites más a mano.

Recuerda que la cocina ante todo tiene que ser práctica y cómoda para cocinar, que es la principal función. Busca que siempre tengas estos tres módulos bien dotados: preparación, elaboración y almacenaje.

Por último dentro de la funcionalidad, intenta utilizar materiales que sean fáciles de limpiar. Piensa que en esta estancia es muy fácil que salten salsas, se manche de aceite o similar, por lo tanto los papeles pintados o pinturas no son la mejor opción. Usa revestimientos más resistentes a detergentes o desinfectantes como el cristal, el acero, la piedra o la cerámica.

  1. Pasar por alto las barreras arquitectónicas.

Siempre hay que estar atento a los posibles obstáculos arquitectónicos que se ponen en nuestro comino. Considera cada detalle y hazlo tuyo, utilízalo para darle ese toque único a tu cocina. Si por ejemplo quisieras abrir la cocina al salón y tienes un pilar cerca, puedes utilizarlo de separación o para colgar un espejo o una estantería que sirva de transición entre una estancia y otra. En este punto es más importante si cabe que las personas que tienes a tu disposición sean profesionales. Ellos te dirán con seguridad si es posible mover un tabique o picar para ganar centímetros en un pilar. Si es un falso techo o si podemos desplazar la ventana a nuestro gusto. Dentro de que tienes que proyectar y dar rienda suelta a tu imaginación, existen unos límites que un profesional te dirá y te ayudará a explotar al máximo.

  1. Solo pensar en la estética.

Este apartado es fundamental y aunque ya hemos hablado de la importancia de la funcionalidad en la cocina, es necesario hacer un apartado exclusivo para esto.

Las cocinas abiertas al salón están cada vez más de moda y es normal. Una cocina que derriba los tabiques y se convierte en una estancia mucho más amplia y luminosa. Das paso a un espacio multifuncional y versátil, pero no es oro todo lo que reluce.

Hay que tener en cuenta muchos más aspectos que el estético.

En el momento de tirar la pared pueden aparecer sorpresas, es recomendable que midas y dibujes bien como va a ser el resultado antes de actuar, puede ser que el abrir ese espacio no te aporte el resultado esperado entorpeciendo la distribución del salón.

También hemos encontrado casos en que la pared de separación albergaba la instalación y esto multiplique el presupuesto bastante. También se ha dado en caso en el que la cocina y el salón tenía un pequeño desnivel, por lo que se tuvo que subir o bajar le suelo de una de las habitaciones para igualarlo, y eso si que puede ser un gran desembolso inesperado.

Ten en cuenta la iluminación de ambas estancias y procura que creen un espacio armonioso una vez las juntes. Por supuesto si abres la cocina, los acabados de ambas salas deben de estar relacionados para crear un ambiente uniforme. La cocina y todo el mobiliario que la conforma debe de convertirse en una pieza más del salón.

Uno de los puntos más importantes y funcional es la campana extractora. Olvídate de una campana escultórica que luego no sea eficaz, busca un modelo empotrado al techo que apenas se vea pero que te garantice la absorción de olores sin un ruido excesivo.

  1. Confundir los profesionales.

Te advertimos que no es lo mismo el profesional de cocinas que el reformista. Es decir, una persona escuchará tus ideas y las diseñará y proyectará en el papel para que se hagan realidad. El otro será quien ya con esas ideas, las materialice. Puede ser que en la misma empresa cuenten con ambos profesionales pero sino, tendrás que contratar a profesionales diferentes y cada uno tendrá sus márgenes de beneficios.

En casos puntuales como puede ser la reforma de una cocina, quizá no sea necesario un interiorista puesto que la misma empresa de reformas te dará un asesoramiento individualizado, pero si quisieras hacer una reforma integral una empresa de diseño podrá darte muchas más ideas ya que cuentan con una experiencia mucho más amplia en ese sector. Esto será un plus de buenos resultados en tu reforma.

Reforma integral minimalista

Desde hace un tiempo  ya, la decoración minimalista se ha vuelto una tendencia con muchísimos adeptos. Escoger directamente un estilo a la hora de empezar nuestra reforma nos hará tener las ideas mucho más claras a la hora de elegir materiales, colores, texturas y formas. Si elegimos el estilo minimalista, todo será mucho más armonioso y mejor equilibrado que si elegimos entre todas las opciones sin un rumbo fijo.

Este estilo busca deshacerse de la ornamentación innecesaria, se trata de un estilo en el que el menos es más. Se crean espacios limpios, despejados, con pocos adornos que distraigan de lo realmente importante que engloba la casa, un ambiente de paz.

Se trata de evitar los elementos superfluos que no aportan más que ser un adorno. Por otra parte a la hora de elegir motivos para los suelos o azulejos, estos deben ser lisos y lo más simples posible para centrarse únicamente en la luminosidad y amplitud.

Las paletas de colores que se suelen utilizar en un estilo minimalista son claras, el blanco por excelencia combinado con grises, marrones o negros.

  • No acumules elementos.

Intenta deshacerte de todo lo que no sea necesario evitando que las habitaciones queden recargadas. Trata de hacer limpieza en el mobiliario, accesorios, adornos, etc. Busca elementos sencillos.

  • Almacenamiento.

Trata de usar espacios amplios de almacenamiento que te permitan guardar de forma coherente lo que no quieres dejar a la vista. Estos espacios de almacenamiento tienen que camuflarse con la decoración hasta fundirse. Lo más recomendable son los armarios empotrados o hechos a medida para que encajen perfectamente en el ambiente sin desentonar.

  • Colores claros y lisos.

Lo más normal es que para una decoración minimalista triunfen los colores claros y neutros, puedes combinarlos con colores naturales como madera y hormigón. Gracias a este abanico de colores conseguirás el ambiente de tranquilidad y calma que andabas buscando. No se trata de buscar que todo combine entre sí, sino de que haya armonía entre lo elementos.

  • Vacío.

Que algo esté vacío no significa que sea minimalista. Hay que encontrar el límite entre la funcionalidad y la sencillez. Encontrar un balance que haga que únicamente elementos como el mobiliario y accesorios principales equilibren la casa. De esta manera, los elementos que hayas elegido tendrán más protagonismo aún y se convertirán en los elementos principales del espacio.

  • La luz.

Juega un papel fundamental en el estilo minimalista. La elección de la orientación del mobiliario, de la distribución de las estancias, de la colocación de los puntos de luz, se convierten en cuestiones fundamentales. Intenta que los elementos que aportan luz artificial se mimeticen con el espacio y no desentonen.

Si tienes claro que lo que quieres es una casa minimalista y vas a enfrentarte a una reforma integral para conseguirlo te daremos algunos consejos que seguro te serán de gran ayuda.

  1. Baño.

Consigue que tu baño se convierta en un refugio para descansar y relajarte. Como ya hemos dicho, no se trata de que todo sea blanco, sino de que todo sea útil sin recargar el ambiente.

Encontrar el equilibrio para centrarnos en lo esencial.

Para conseguir un ambiente minimalista es importante que todo esté limpio y muy ordenado. Trata de reducir la cantidad de productos de higiene que están a la vista o de mantenerlos bien almacenados.

Colores claros mezclados con azules, verdes o crema, harán que el ambiente del baño sea mucho más calmado. Si consigues combinarlo con elementos naturales como plantas de interior o madera quedará mucho mejor. Los materiales que más predominan son aquellos que parecen poco industrializados por ejemplo la madera y la piedra.

Si tienes espacio, recomendamos una bañera exenta que dará esa sensación de calma a la hora de tomar el baño. También es una buena opción inodoros suspendidos con diseños sobrios y sencillos. Lo importante es siempre llevar la misma línea estética.

  1. Cocina.

Se trata de vivir la cocina con lo mínimo e imprescindible. Que tu cocina se convierta en una oda al orden. Busca siempre la funcionalidad y limpieza a la hora de pensar en los materiales, es decir, los revestimientos que tengan los muebles serán muy importantes para que su limpieza sea fácil.

Te recomendamos que tengas una distribución diáfana, que se vea un ambiente despejado en los pasos o a la hora de elaborar la comida. En los ambientes minimalistas priman las líneas rectas, busca la simetría en los muebles y en la organización.

Intenta encontrar unidad en los revestimientos y colores de la cocina, así favorecerás la sensación de amplitud si tu cocina no tiene muchos metros cuadrados. Si buscas revestimientos con pocas juntas mejor, es decir, que sean continuos.

Cuando vayas a diseñar el mobiliario de la cocina intenta que nada esté a la vista. No incluyas vidrios en las puertas, mejor ciegas. Olvídate de las vitrinas o estanterías que no dan sensación de orden. De igual manera haz con los electrodomésticos. Coméntale al electricista tu idea para que incluya horno, microondas, lavavajillas, etc. Dentro de los muebles y así queden completamente escondidos y manteniendo la unidad.

En cuanto a la iluminación en la cocina aprovecha al máximo la natural, orientando la cocina hacia la luz. En el caso de que sea inviable y tengas que recurrir a iluminación artificial, busca una que sea cálida con focos que se integren en el mobiliario.

  1. Dormitorio.

Las claves son el orden, el equilibrio, la armonía y la pureza. Todo debe girar alrededor de la cama, esta debe tener la mejor ubicación en la sala, por lo tanto la pared donde se coloca el cabecero será la protagonista. Para el suelo se aconseja la naturalidad del parquet, preferiblemente de colores claros y de láminas largas.

Intenta distribuir el dormitorio teniendo en cuenta la iluminación, esto es un aspecto fundamental. Puedes añadir espejos que reflejarán la luz y darán mayor sensación de amplitud.

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies
Teléfono: 655-03-44-55
Hello. Add your message here.